- Dado que nuestro objetivo es hacer que Internet sea inviable como fuente de información empezaremos con la creación de multitud de Fake News en varios idiomas y de todo tipo de temas: política, entretenimiento, arte, deporte, etc. Siendo unas pequeñas tergiversaciones de cosas reales mientras que otras serían casi completamente inventadas y carentes de contexto, pero todas compartirán el estar basadas en información real, así será más difícil diferenciar la mentira de la verdad, y que tendrán un tono incendiario y amarillista para apelar al odio, la ira y la indignación, la mejor manera de hacer que se crean el bulo.
- Seguidamente, se publicarían toda la desinformación a la vez a través de las redes sociales y en todos los formatos posibles (textos, videos cortos y largos), ilustrando las noticias con imágenes tanto de IA como modificadas. Parte de esta “información” aparecerá en diarios y periodicuchos sin escrúpulos en artículos online patrocinados pero que sin decir que lo son, así obtendrán una pátina de veracidad para engañar a los más crédulos, quienes terminarán por compartir la noticia.
- Mientras todo esto empieza a ocurrir se contratan bots y cuentas falsas desde un Troll Center para esparcir aún más las mentiras, con lo que solo quedaría que algún vocero se hiciera eco para que empiecen a pillar tracción por su cuenta, como un efecto bola de nieve.
Así dará la falsa sensación de que todo el mundo habla de lo mismo y la presión social hará el resto, obligando a la gente generar una opinión al respecto o comprar la de otro. - En el siguiente paso, como una falsa calma, vendrán las explicaciones de lo realmente ocurrido, lo que nosotros aprovecharemos para generar más confusión con muchas explicaciones, todas diferentes entre sí y todas falsas, algunas más realistas, otras más absurdas; pero al final todos creerán tener la razón. Será entonces cuando aparezcan las conspiraciones y teorías, la “verdad que no quieren que sepas” prefabricada por nosotros con videos que usarán metraje de personajes del mundo de la conspiración y audio generado a conveniencia junto con imágenes para ilustrarlo, algo así como lo que pasó con la DANA en Valencia.
- Siguiente fase, y con ella empieza el vandalismo digital aprovechando el estado de paranoia inducida.
Ataques y sabotaje a la Wikipedia y sitios similares que dan información, suplantación de webs confiables y creación de otra nuevas que digan lo que nosotros queremos y la ubicaremos en los primeros resultados de los motores de búsqueda, enterrando la información de verdad en una avalancha de basura. Todo gracias a las técnicas maliciosas de SEO que la misma Google recomienda.
Y, aunque nadie suele pasar de la segunda página de resultados de Google, también pondremos más basura a lo largo de los resultados.
Las webs nuevas serán, en su mayoría, murallas de texto que no dicen nada y solo repiten infinitamente lo que ya se sabe, desincentivando a la lectura. Es decir, como los periódicos de verdad. - Sexto punto a seguir, terminar de expandirnos, traduciendo la basura con traductores automáticos para que la “información” llegué aún más dañada e inentendible si cabe, de forma que aparezcan artículos gigantes con partes en italiano, checo y ruso en un motor de búsqueda español.
Por otro lado, haríamos uso de malware para impedir el acceso a internet de las personas infectadas y evitar que el resto de gente lo haga por miedo. Esto se haría mediante phishing, una técnica de hackeo qué consiste en hacer pasar a la presa por una url falsa que redirige a la verdadera y en el proceso captura la información y le da permisos al dueño de la falsa URL. - El paso final es crear nuevas IAs, cada una especializada en algo (información, texto, videos e imágenes), basadas en el código de DeepSeek o OpenIA, y alimentarlas con todo lo que hemos creado de manera que puedan generar basura por sí mismas y al no actualizar los bancos de información y solo alimentarlos con lo que ella crean se terminarán por degenerar progresivamente hasta ser inútiles y seremos nosotros los que iremos publicando periódicamente todo este torrente de desecho inmundo hasta haber acabado, finalmente, con este mal que envenena el conocimiento que llamamos Internet.